El dia que Lucky me eligio a mi
El día que Lucky me eligió a mí
A veces, los momentos más oscuros de nuestra vida se cruzan con una luz inesperada. Y en mi caso, esa luz tenía cuatro patas, una cola inquieta y unos ojitos llenos de vida. Se llamaba Lucky. Solo tenía dos meses cuando llegó a mi vida… y yo estaba rota.
Venía de una relación muy tormentosa, de esas que te dejan el alma cansada. No sabía bien qué rumbo tomar, solo sabía que necesitaba empezar de nuevo. Fue entonces cuando, por cosas que solo el destino sabe explicar, Lucky apareció.
Nació en La Coruña, y aunque era tan pequeño, traía consigo una energía enorme. Cuando lo vi por primera vez, sentí algo que no había sentido en mucho tiempo: calma. No fue solo que yo lo adoptara… fue él quien me adoptó a mí. En ese instante entendí que los cambios más importantes no siempre vienen con ruido. A veces, llegan con patitas suaves y un corazón dispuesto a quererte sin condiciones.
Desde entonces, Lucky ha estado a mi lado en todo: ha viajado conmigo, me ha acompañado en los estudios, en las búsquedas de trabajo, en las pequeñas alegrías y en los días grises. Tiene 9 años ya, y cada canita en su hocico es una historia que compartimos. Es mi compañero de vida, mi hogar en movimiento, mi familia.
Esta historia no va solo de adoptar un perro. Va de sanar, de volver a confiar, de reconstruirse desde el amor más puro. Porque cuando todo parecía perdido, Lucky me enseñó que todavía había mucho por vivir.